¿Quién eres y a qué te dedicas?
“Mi
nombre es Violeta Montreal. Soy escritora, soy ilustradora y me dedico al mundo
de los libros. Mi trabajo es escribir historias, ilustrar esas historias que no
tienen ningún sentido, por supuesto, si no hay un niño o una niña leyéndolos
después.[…] Los temas que puedo escoger para mis libros suelen ser aquellos que
sirven para mejorar… podríamos decir el mundo, pero eso puede sonar …¡demasiado!...mejorar
a las personas.
¿En qué buscas la inspiración?
La
inspiración yo principalmente la busco en cualquier cosa. Cuando necesitas
algo, es como si el mundo que te rodea, se convirtiera en ese algo que
necesitas […] Simplemente es la necesidad la que hace que la inspiración surja;
por ejemplo, si yo cojo una piedra y a la piedra le pongo un ojito, un piquito
y unas patitas y ¡ya tenemos el pajarito! Quien dice piedra sustituye piedra
por cualquier cosa: piedra, papel, hojas, troncos, cortezas, arena, colores,…
todo. Todo es esa chispa que todo surge en la inspiración. Y estamos hablando
solo de objetos, ni que decir tengo que las palabras… las palabras…cualquier
palabra es una chispa también para la inspiración. Las palabras se convierten
en objetos y de esas palabras surgen miles de historias.
¿Has tenido alguna crisis creativa?
Por
supuesto. Además, las crisis creativas las llamamos “creativas crisis”, pero
realmente es la vida. La crisis creativa se tiene siempre que se enfrenta un
trabajo. Para superar mis crisis creativas, que son constantes, cada vez que me
enfrento a un dibujo, le puse nombre a esas tres cosas que suceden cada vez que
nos enfrentamos a un trabajo. Y no sólo les puse nombre, les puse colores.
Imaginaros un semáforo: verde cuando dice adelante, rojo peligro y naranja
precaución. Esos tres pasos, pero en diferente orden, son los que yo llamé
universales para que los trabajos salgan geniales:
-
Paso 1 _ NARANJA: ATREVERSE
siempre. Sea cual sea el trabajo, lo primero sería atreverse y empezar a
trabajar.
-
Paso 2 _ ROJO: RESISTIR la
sensación de no puedo. Este paso es el más peligroso; cuando, una vez nos hemos puesto a trabajar,
el trabajo nos habla y nos dice “Hummm…te
voy a salir mal”. Entonces, sólo nos queda resistir; a pesar de que pensemos
que no nos va a salir el trabajo, continuamos trabajando.
-
Paso 3_ VERDE: INSISTIR.
Únicamente si resistimos y continuamos, puede aparecer el tercer paso. En vez
de escuchar que no podemos, escuchamos sólo a nuestro trabajo. Él nos va diciendo lo que necesita; a lo mejor no
nos sale perfecto, pero llegamos mucho más lejos.
Con estos
tres pasos se supera cualquier crisis, creativa y no creativa.
¿Es la creatividad algo innato?
La
creatividad es un don, no nos vamos a engañar.
Igual que hay personas que tienen el don de bailar muy bien o tocar un
instrumento casi sin estudiar o aprenderse la tabla de multiplicar sin ninguna
dificultad. Todo lo que perseguimos se podría dividir en cuatro partes:
-
Un 25% es la SALUD.
-
Un 25% es la SUERTE, que
se busca; si no se busca, no siempre se encuentra.
-
Un 25% es el TRABAJO, que
no tiene nada que ver con la creatividad y esos dones, que mencionaba, que nos
dan facilidad para hacer las cosas. La dedicación que le dediquemos a esta
parte hará crecer nuestra creatividad, sin importar aquello que nos falta.
-
Un 25% son los DONES, que implica conocerse muy bien, sin
engañarnos.
La
creatividad se puede desarrollar como si fuera un músculo, teniendo en cuenta
los tres pasos universales. La creatividad es un don, pero se puede
desarrollar.
¿Piensas que la creatividad está relacionada con la inteligencia?
Cuando yo
oigo la palabra inteligencia, lo primero que surge en mí es la idea del cerebro.
E inmediatamente, al hablar del cerebro siempre pienso en un trozo de
plastilina. […] Si yo pienso, si yo escucho, si yo pregunto, si yo dudo, si yo
tengo curiosidad, … es como si ese cerebro se fuese volviendo más blandito. Es
como la plastilina, que cuando está blandita se pueden hacer todo tipo de
dibujos, todo tipo de formas con ella. Sin embargo, cuando no escucho,
cuando no, cuando no atiendo, cuando no
pregunto, cuando pienso no sé,… ese cerebro se está haciendo más duro más
rígido. La plastilina cuando está rígida es cuando no se puede crear nada, es
cuando surge un problema. Nos damos cuenta de que estamos preparados para
solucionarlo cuando tenemos el cerebro blandito. […] Con un cerebro blandito veremos
en una pelota saltarina la posibilidad de fotografiarla y convertirla en un
planeta.
Todo está
relacionado, pero tenemos que trabajarlo, no hay atajos. Tenemos que trabajar y
el esfuerzo es el único camino . […] Lo que merece realmente la pena de la vida,
lo que realmente nos sirve, es lo que más nos cuesta, así que ¡a esforzarse
toca!
No hay comentarios:
Publicar un comentario